Categoría: Dormitorio

  • Beneficios del nido bebé los primeros meses

    Beneficios del nido bebé los primeros meses

    Entre los sistemas de descanso para bebés que puedes encontrar en el mercado, uno que está teniendo especial demanda en los últimos años es el nido bebé o cojín nido.

    La principal ventaja de este accesorio es su multifuncionalidad, ya que, como te vamos a explicar, no solo lo puedes usar como reductor de cuna para tu recién nacido, sino que tiene muchas utilidades en los cuidados de tu peque y también alguna para ti.

    Qué es un nido bebé o cojín nido

    En realidad, un nido bebé es algo bastante sencillo. Se compone de una base de espuma y textil, que se rodea de un rulo mullido. Su forma es anatómica para que el recién nacido se acople perfectamente y se sienta confortable.

    Nido bebé desmontable Cool Dreams

    La base y el borde, normalmente desenfundables, suelen estar unidos por una cremallera. Así se pueden separar las dos piezas para darles usos independientes si es necesario.

     

    El largo de un nido bebé oscila normalmente entre los 70 y los 85 centímetros, mientras que de ancho mide entre 50 y 60 cm, por lo que el bebé tiene espacio suficiente para tumbarse estirado hasta los nueve meses aproximadamente.

    Además, la mayoría de los modelos disponen de algún sistema de apertura -cinta, velcro o botón de presión- en la parte inferior para que las piernas del bebé puedan estar más sueltas. 

     

    Unión inferior del nido bebé en blog Cool Dreams

    Respecto al diseño, puedes encontrar una gama amplísima de colores, con fondo estampado o liso.

    Reductor de cuna 

    Después de nacer, tu bebé, que ha pasado nueve meses recogido en el saco amniótico y en posición fetal, puede sentirse desprotegido en la cuna o en la minicuna por el vacío que le queda alrededor de su pequeño cuerpo.

    Usar el nido bebé como reductor de cuna evitará que tu recién nacido note un cambio brusco de entorno y que se dañe la cabecita con los barrotes de la cuna si se desplaza hacia los bordes buscando el contacto.

    La sensación de protección y abrigo que producirá el cojín nido en tu peque favorecerá su descanso y, por tanto, su desarrollo.

    Otros usos y ventajas del cojín nido

    Además de su función como reductor de cuna, el nido bebé o cojín nido tiene otras utilidades que te sacarán de más de un apuro los primeros meses:

    Nido colecho

    Tanto si tu bebé duerme junto a ti en una cuna colecho como si lo hace en tu misma cama, el nido bebé le aportará una seguridad extra ante posibles caídas o aplastamientos.

    Cuna de viaje ocasional

    Si no dispones de una cuna de viaje, puedes llevarte el nido bebé. Su peso ligero hace que sea muy fácil de transportar.

    Por otro lado, los modelos de cojín nido desmontables, como los de Cool-Dreams, tienen la ventaja añadida de poder separar la base del rulo para guardarlos mejor en el espacio disponible dentro del maletero del coche o de una bolsa de viaje. 

    Cambiador de bebé

    Colocando el cojín nido sobre una mesa, una cómoda o incluso en el sofá, puedes cambiar a tu bebé con seguridad, ya que el borde hace de barrera de protección.

    Lo mejor, en este caso, es que la parte inferior quede abierta para que tengas mejor acceso a tu peque a la hora de limpiarle el culito, cambiarle el pañal o ponerle pomada.

    Cojín de lactancia

    A la hora de dar el pecho a tu recién nacido, el rulo que bordea el nido bebé, separado de la base, te puede servir como un cojín de lactancia para adoptar una postura más correcta. 

    Colocándolo en forma de U sobre tu abdomen, tu bebé quedará posicionado en la altura idónea para un mejor agarre, mientras tú apoyas los brazos sobre el cojín y evitas el dolor de espalda.

    Protector de cuna

    Asimismo, ese rulo del nido bebé te vendrá muy bien para proteger a tu peque de los barrotes cuando ya no necesite reductor de cuna.

    Parque de juegos

    Cuando tu bebé consiga ya sentarse, lo cual suele suceder en torno a los seis meses, el cojín nido puede ser un buen sitio donde entretenerse con sus juguetes.

    Y, si bien porque te los han regalado o bien porque los has comprado, te juntas con dos nidos bebé, una buena idea es enfrentarlos y unirlos por los extremos de ambos bordes para conseguir un espacio de juego más amplio, que tu peque podrá aprovechar hasta los dos o tres años. 

    Por último, a todas estas funcionalidades habría que añadir una que está pensada para ti y que es previa al nacimiento de tu bebé: la de cojín de maternidad. El rulo del nido bebé te puede ayudar a adoptar una postura más confortable durante el embarazo si te tumbas de lado y te lo colocas delante, a lo largo de tu cuerpo, con uno de los extremos entre tus piernas, de forma que estas queden alineadas con tu cadera. 

    Teniendo en cuenta todas estas funcionalidades y ventajas, está claro que el nido bebé o cojín nido es un gran aliado de la maternidad y la paternidad. Así que no olvides incluir este artilugio en tu lista de lo que se necesita para un bebé recién nacido.

  • El comportamiento de los perros con embarazadas

    El comportamiento de los perros con embarazadas

    Si, en un anterior artículo, te hablamos de la relación entre perros y recién nacidos, esta vez queremos adelantarnos a la llegada del bebé y ver cómo es el embarazo con perros en casa.

    Y es que el comportamiento de los perros con sus dueñas embarazadas suele cambiar desde el primer mes de la gestación, aunque variará en función de la personalidad del can, de cómo esté educado y de la relación que tenga con su dueña en particular.

    ¿Pueden los perros detectar el embarazo?

    Habrás leído alguna vez noticias sobre estudios científicos relacionados con la capacidad de los perros para detectar ciertas anomalías, enfermedades y cambios en el estado de ánimo de sus dueños.

    Pues bien, aunque no hay evidencia científica al respecto, se ha observado que, cuando una mujer se queda embarazada, su perro nota enseguida tanto los cambios físicos y anímicos como las alteraciones en el entorno (rutinas, costumbres, cambios en la casa, etc).

    Por tanto, se puede decir que, de alguna manera, tu perro sí detecta que estás embarazada.

    Cómo cambia el comportamiento de los perros con su dueña embarazada

    Olfatea su vientre

    Perro olfatea vientre de embarazada

    Uno de los gestos característicos que suelen tener los perros con las embarazadas es olfatear su vientre. Su agudo sentido del olfato les permite detectar los desajustes en los niveles hormonales de su dueña a través del olor de algunas sustancias corporales, como el sudor o la orina.

    Cambia su actitud

    Perro con embarazada en casa cambia actitud

    Otro cambio que quizás observes en tu perro si te quedas embarazada es un cambio en su estado de ánimo o en su actitud. ¿Solía ser un perro alegre y enérgico? Pues no te extrañes si empiezas a verlo tristón; ¿Le gustaba mucho comer? Tal vez lo deje de hacer temporalmente. 

    También es muy posible que, durante el embarazo, tengas a tu perro más pegado a ti de lo habitual y se muestra más cariñoso, o, justo al contrario, te evita. Puede reaccionar de cualquiera de las dos formas ante el cambio de olor de tu piel.

    Orina donde no debe

    perros con embarazada en casa orina donde no debe

    Por otra parte, los perros pueden desorientarse cuando detectan el cambio de aroma en su dueña embarazada.

    Esta desorientación les lleva a veces a orinar en lugares inapropiados, como el salón o un dormitorio.

    Mordisquea las cosas del futuro bebé

    Perro mordisqueda cosas de futuro bebé

    A algunos perros les da por mordisquear cosas destinadas al futuro bebé si las encuentran a su alcance.

    El embarazo con perros en casa: qué debes tener en cuenta

    Cómo ya hemos comentado al principio, no todos los perros reaccionan igual ante el embarazo de su dueña, por lo que es difícil saber qué sucederá con el tuyo.

    Sin embargo, puedes ayudar a tu peludo a adaptarse a la nueva situación siguiendo estos consejos:

    Refuerza su entrenamiento

    En realidad, esto deberías hacerlo desde el momento en que estés pensando en quedarte embarazada. El objetivo es que tu perro recuerde normas esenciales, como no hacer sus necesidades dentro de casa, no coger objetos que no sean suyos, sentarse cuando se lo ordenas o no ladrar si llega alguien a casa.

    Preséntale al futuro bebé

    Es una forma de que vaya familiarizándose con el nuevo miembro de la familia antes de que nazca. Puedes acercar tu barriga a su hocico y a sus orejas y dejarle que huela y escuche. Aunque te parezca mentira,  será capaz de escuchar los latidos de tu bebé en tu vientre.

    También enseñarle algunas cosas que hayas comprado para tu bebé, como ropita o juguetes.

    Atiende sus cambios de ánimo

    Si ves que se pone triste, dale más mimos o anímale con juegos.

    ¿Por qué no probar a que duerma junto a ti en una cama elevada para perros? 😃 Así, si quieres hacer colecho cuando nazca tu bebé, tu perro podrá conservar su espacio al otro lado de la cama y seguirá sintiéndose parte de la familia. [/col]

    Desparasítalo una vez al mes

    Es la frecuencia de desparasitación que se recomienda durante el embarazo frente a la habitual, que se ciñe a una vez cada tres meses.

    Aunque nuestro organismo está preparado para defenderse de muchos parásitos, es bueno extremar precauciones si estás embarazada.

    Familia de cinco…¡más uno!

    Para que veas un caso real, te recomendamos que mires con atención este vídeo de una pareja de “embarazados” con dos perros y un gato.

    El vídeo refleja la actitud de las mascotas los días previos al parto y también durante la llegada de la bebé. Fíjate en que no muestran apenas extrañeza, ya que los dueños se han ocupado de familiarizarlos con la pequeña desde que estaba en la barriga de mamá. Incluso parece que los perros reconocen el olor de su “hermanita”. ¡Qué ternura! 🐶🐶😍

     

    Como ves, un embarazo no implica solo cambios para la mujer, sino también para los que están a su alrededor, incluido su perro. 

    Visto de forma positiva, si se dan apoyo mutuo, pueden formar un buen equipo perros con embarazadas, ya que ambos están dotados de una gran sensibilidad. 😌

  • Cosas que necesitas para un recién nacido y para ti

    Cosas que necesitas para un recién nacido y para ti

    ¿Has hecho ya los preparativos para la llegada de tu bebé? 

    Cuando empiezas a prepararlo todo y no tienes experiencia previa, te abruma un poco ver la cantidad de cosas que necesitas para un recién nacido. 

    ¿ Pero es todo imprescindible? Seguramente, no. Lo que te va a hacer falta dependerá de tu caso particular: si tu parto se desarrolla con normalidad, si vas a dar o no el pecho a tu bebé, si vas a tener que estar muchas horas al día fuera de casa, si a tu bebé le cuesta conciliar el sueño o duerme como un lirón, etc.

    A modo de sugerencia, hemos preparado una lista de cosas que puede necesitar tu bebé, junto a otras que te pueden venir muy bien a ti en el embarazo y en el posparto o cuarentena. ¡Toma nota!

    Cosas que necesitarás tú

    Durante el embarazo

    Ropa premamá y cosas que necesitas

    Los preparativos para la llegada de tu bebé empiezan en el embarazo. Son muchos los cambios que experimenta tu cuerpo y, para adaptarte a ellos, necesitarás tres cosas principalmente:

    • Ropa de maternidad: a partir del primer trimestre, cuando la barriga se empieza a notar más y las caderas se hayan ensanchado, es recomendable que uses prendas más holgadas, puesto que las tuyas de siempre te apretarán. Esto no quiere decir que tengas que renunciar a unos vaqueros o unos leggins, puesto que puedes encontrar en el mercado modelos premamá que no te oprimen el abdomen, así como vestidos largos, sueltos y con el corte por debajo del pecho con los que irás cómoda y, a la vez, lucirás preciosa.
    • Braguitas premamá: este tipo de braguitas de talle alto están diseñadas para adaptarse al crecimiento natural del abdomen sin comprimirlo, gracias a un algodón elástico muy suave. Aunque, al principio, te pueda resultar raro llevar unas bragas tan grandes, enseguida comprobarás lo que te reconforta tener la barriga y las lumbares recogidas durante el embarazo. Las hay lisas de estilo clásico, pero también con colores y estampados divertidos.
    • Crema antiestrías: al aumentar tu cuerpo de volumen- sobre todo, en el vientre, la cadera y los senos- tu piel necesita ganar elasticidad, por lo que es muy recomendable que te apliques a diario una crema específica que evite la aparición de estrías. 

    Parto y posparto

    Extractor leche materna y cosas que necesitas para tu bebé

    Cuando ya das a luz, te enfrentas a situaciones nuevas, no solo por la crianza y el cuidado de tu bebé, sino también por tu propia recuperación durante el puerperio o cuarentena. Estas son las cosas que consideramos imprescindibles durante esta etapa:

    • Braguitas desechables: las primeras cuatro o seis semanas después de dar a luz, lo normal es que expulses cierta cantidad de fluidos, como restos de sangre o moco cervical. A estos fluidos se les llama “loquios”. Las braguitas desechables te vendrán muy bien para no manchar las tuyas, ya que no vas a tener demasiado tiempo para andar lavando bragas cada dos por tres.
    • Compresas: las compresas tocológicas, hechas en un 90% con algodón, facilitan la transpiración y, por tanto, la cura de la inflamación o la herida que se haya producido en el parto.
    • Sujetadores de lactancia: si tienes decidido que vas a darle el pecho a tu bebé, lo mejor es usar sujetadores de lactancia, ya que tienen un sistema de apertura en las copas que te facilitan la preparación de cada toma. Como en el embarazo vas a tener que usar sujetadores más grandes y cómodos que los tuyos habituales, te compensa comprar y ponerte los sujetadores de lactancia ya en esa etapa.
    • Discos de lactancia: este tipo de discos absorbentes evitarán las manchas o la humedad producidas en la ropa a causa de las pérdidas de leche entre toma y toma, o cuando un simple llanto de bebé estimule la producción de leche que no va a ser extraída de inmediato. Además, los discos protegerán a tus pezones de la humedad que quedaría en la ropa si no los usaras. Los puedes comprar desechables o lavables.
    • Extractor de leche manual o eléctrico: aparte de estimular la producción de leche, usar extractor de leche durante la lactancia, te ayudará a evitar mastitis, esas inflamaciones en los pechos que sufren muchas madres. Además, este aparato puede ser útil también durante el destete. 

    Cosas que necesitará tu bebé

    Ahora empieza la lista más larga. Mira todo lo que puede necesitar tu bebé en su primer año de vida.

    Baño e higiene

    El baño del bebé y lo que necesitas

    • Pañales desechables o de tela: normalmente, un bebé recién nacido necesita una media de siete pañales al día, lo que supone un total de 200 pañales al mes. Así que tendrás que hacer buen acopio de ellos. Optar por pañales desechables o pañales de tela dependerá de tu tiempo, de tu economía y de la importancia que le des al ecologismo. El pañal desechable es más barato, de un solo uso y va a parar a la basura, mientras que el pañal de tela es más caro, reutilizable y hay que lavarlo. Tú decides.
    • Bañera bebé: una bañera para bebés es el sitio más seguro donde puedes darle un baño a tu peque, puesto que es de tamaño reducido y material blando pero firme, suele ser antideslizante y la puedes colocar donde mejor te convenga.
    • Reductor bañera: aunque la bañera de tu bebé sea pequeña, un reductor de bañera hará que se sienta más seguro y se mueva menos cuando lo bañes.
    • Termómetro para el agua.¿Sabes cuál debe ser la temperatura del agua para el baño del bebé?. Lo ideal es que el agua esté entre los 35º y los 37º, y la forma más exacta de comprobarlo es con un termómetro para el agua. 
    • Gel y champú para bebé: no te harán falta las primeras semanas, en las que bastará con que laves a tu recién nacido con agua. Pero cuando empieces a usar el gel y el champú, asegúrate de que estén indicados para la piel de los bebés.
    • Toalla: es muy importante que seques por completo la piel de tu bebé después de cada baño. Para ello, en vez de una toalla simple, te vendrá muy bien una capa de baño de bebé con capucha, ya que impedirá que cubrirá al peque completamente e impedirá que se enfríe después del baño.
    • Cepillo y peine para bebés: cepillar o peinar la cabecita de los bebés, además de ser agradable para ellos, estimula el crecimiento de su pelo. 
    • Toallitas húmedas: de las cosas que necesitas para un recién nacido, las toallitas húmedas se podrían calificar de “imprescindibles”, sobre todo cuando sales de casa. En principio, son para limpiar el culito del bebé cuando lo cambias, pero acabas usándolas como “limpiatodo”. 😅
    • Gasas esterilizadas: es conveniente que las uses para limpiar los ojitos de tu recién nacido empanadas en suero o en agua templada.
    • Cortauñas: aunque hasta las tres o cuatro semanas después de nacer, no debes cortarle las uñas al bebé – las del recién nacido están muy adheridas a la piel-, cuando lo hagas, necesitarás un cortauñas o unas tijeras adecuadas para sus pequeños deditos.
    • Muselinas: a estos fulares de gasa para bebés, hechos de algodón o bambú, les vas a sacar muchísimo partido, ya que les puedes dar múltiples usos: arrullo, mantita de verano, babero, sabanita o mosquitera para el carro, toalla, parasol para la ventana del coche, reposacuellos, etc. Además, como hay muselinas con diseños muy bonitos, cuando tu peque deje de usarlas, las puedes aprovechar tú como pañuelo.

    De paseo

    Cosas que necesitas para un recién nacido en el paseo

    • Capazo/cochecito: hasta los seis meses de edad aproximadamente, los bebés tienen que ir en un capazo o cochecito para pasear, puesto que antes no suelen conseguir mantener la cabeza firme ni sentarse.
    • Bolso para silla paseo y cambiador: salir a pasear con tu bebé implica tener en cuenta muchas necesidades que pueden surgir: que te pille la hora de comer, que se manche comiendo, que se haga caca, que empiece a hacer frío…Por tanto, deberás llevar unas cuantas cosas que puedas necesitar, como biberones, pañales, toallitas, etc. En un bolso para silla de paseo, todo esto va ordenado para encontrar cada cosa con rapidez. Por otro lado, el cambiador también te puede hacer falta cuando sales de casa, así que ¡no te olvides de meter en el bolso un cambiador de bebé portátil!
    • Funda para capazo: aparte de proteger del frío y el viento, la funda para capazo puede hacer de escudo ante cualquier objeto que caiga accidentalmente sobre la cuna.
    • Manta para capazo/cochecito: siempre te vendrá bien llevar una mantita en el cochecito por si refresca, especialmente en los meses de primavera y de otoño, donde las temperaturas varían más a lo largo del día.
    • Silla paseo: la necesitarás cuando veas que tu bebé tenga unos seis meses aproximadamente y sea capaz de mantener erguido su cuello, así como sentarse. Si compras un modelo duo, que incluye capazo y silla, solo tendrás que cambiar una cosa por otra en el chasis.
    • Burbuja de lluvia: suena a algo mágico, pero simplemente es un plástico que se acopla a la silla para proteger al bebé del agua cuando llueve.
    • Mochila ergonómica portabebé o fular: el porteo de bebés tiene múltiples beneficios, pero, si te decides a llevar a tu hijo/a en un porteador, procura hacerlo en una mochila ergonómica que se adapten a su crecimiento para evitar la displasia de cadera o, si no, en un fular colocado de la forma adecuada.
    • Silla de coche con contramarcha: hasta que tu bebé pese entre 10 y 13 kg, tendrá que viajar en una silla de coche del grupo 0/0+, que permite la contramarcha. Este es un detalle crucial, porque, en caso de accidente, reduce cinco veces la probabilidad de que el bebé sufra lesiones graves, al minimizar los movimientos de la cabeza en relación al frágil cuello del niño.
    • Reductor de silla contra marcha: como complemento de lo anterior, el reductor de silla de coche, permitirá que la puedas usar la silla a contramarcha con tu recién narciso.

    A dormir

    Cosas que necesita un recién nacido para dormir

    • Moisés: el capazo de mimbre o palma de toda la vida tiene la ventaja de que lo puedes transportar a cualquier parte. En él, tu recién nacido se sentirá resguardado y confortable hasta los cuatro meses de esas aproximadamente.
    • Cuna tradicional o convertible: piensa muy bien qué cuna te conviene antes de comprarla. Hoy en día, la tendencia por la que apostamos las marcas especializadas como Cool-Dreams es la cuna convertible o cuna evolutiva, ya que, al convertirse en cama, alargas su vida útil hasta los cuatro o cinco años. Incluso, hay algún modelo que evoluciona hasta los diez años, como la cuna convertible Ovetto.
    • Colchón de bebé que disipe el CO2: la transpirabilidad de un colchón de cuna es fundamental para reducir el riesgo de asfixia y de muerte súbita. Por eso, te aconsejamos que optes por un colchón que disipe el CO2 y deje fluir el aire.
    • 2 juegos de sábanas: lo mínimo son dos juegos para poder tener un recambio siempre limpio si ensucia el que tienes puesto. Como recomendación, escoge tejidos transpirables e hipoalergénicos, como el algodón pima. 
    • 2 protectores de colchón impermeables: una cosa es que los escapes de tu bebé ensucien las sábanas, que tienen fácil lavado, y otra que calen al colchón. Por eso, los protectores de colchón impermeables te ahorrarán disgustos. Al igual que con las sábanas, fíjate en las propiedades del tejido.
    • Chichonera o protector cuna: los barrotes de la cuna hacen de barrera anticaídas para el bebé. Pero, al mismo tiempo, las manitas o la cabecita del peque pueden quedar atrapadas en los huecos si le da por asomarse o se desplaza a los bordes mientras duerme. Este riesgo se elimina con una chichonera o protector de cuna, aunque lo ideal es que sea transpirable.
    • Cambiador: a la hora de cambiar a tu bebé, necesitas una base de apoyo cómoda para él/ella y que tú puedas colocar a la altura adecuada para ti. 
    • Cuna de viaje: este tipo de cuna puede ser muy útil si viajas con frecuencia y lo haces en coche. Si no, como alternativa más ligera y ocasional, puedes optar por un cojín nido, donde tu bebé puede dormir recogido confortable.
    • Lamparita: la luz tenue de la lamparita creará un ambiente relajante para tu bebé poco antes de dormir. Además, siempre será mejor encender la lamparita que la luz del techo si te tienes que levantar durante la noche.
    • Chupete: lo recomendable es que sea de silicona, ya que este material no se contamina con olores ni se deforma con el uso.

    A comer

    Cosas que necesita un recién nacido para comer

    • Esterilizador eléctrico/para microondas: para eliminar completamente los gérmenes que pueda haber en los biberones, después de lavarlos, hay que esterilizarlos. Esto lo puedes hacer con un esterilizador eléctrico o con uno para microondas.
    • Baberos: durante los seis primeros meses, los bebés ensucian muchos baberos. Necesitarás unos ocho al día.
    • Bolsas/recipientes para almacenar leche materna: la forma más adecuada de guardar la leche es en estas bolsas que están esterilizadas y tienen cierre hermético. Suelen incorporar una etiqueta para apuntar la fecha de almacenaje en la nevera o en el congelador.
    • Trona: este tipo de silla adaptada para bebés les permite adoptar una postura y una sujeción correctas para alimentarse. Existen modelos de trona convertible, cuya altura se ajusta a la edad de tu peque.

    A jugar

    Cosas que necesita un recién nacido para jugar

    • Hamaca: es un buen recurso de entretenimiento para el recién nacido, ya que se puede mecer en ella y distraerse con los colgadores que suele incorporar. Algunas, incluso, incluyen música. Pero ¡ojo!, no debes usar la hamaca para que el bebé duerma en ella, porque, al dormirse, la cabeza le quedaría inclinada hacia delante y eso le podría provocar la asfixia.
    • Manta de actividades: no es un entorno de juego seguro, sino que sus diferentes texturas, colores y sonidos estimulan el desarrollo cognitivo del bebé.
    • Juguetes de aprendizaje: los hay de muchos tipos y lo que tienen en común es que estimulan el aprendizaje de los más pequeños, bien sea por su diversidad de formas, colores y texturas, o bien por las posibilidades de interacción y juego que ofrecen a los niños, dependiendo de su edad. Algunos ejemplos son los rompecabezas, la pelota Montessori, la Tabla de equilibrio Montessori, los bloques de construcción o los bloques sensoriales.

    Seguridad

    Protectores enchufes para niños y cosas que necesitar para la seguridad del bebé

    • Parasol en la ventana de coche: como hemos comentado antes, puedes usar una muselina para tapar la ventanilla del coche y proteger a tu bebé del sol, pero un parasol tiene la ventaja de poderlo dejar fijo en el cristal.
    • Tapa enchufes: habrás oído alguna vez la tendencia que tienen los niños pequeños a meter los dedos en los agujeros de los enchufes, con el riesgo de electrocución que ello implica. Esto no te debe preocupar mucho hasta que tu bebé empiece a gatear, pero no está de más que vayas cubriendo los enchufes con las piezas protectoras de plástico que venden para tal fin.
    • Espejo retrovisor: aunque todos los coches tienen espejo retrovisor para visualizar la parte trasera, este no te servirá para ver a tu bebé cuando viaje en su sillita a contramarcha. Con un espejo retrovisor colocado en el asiento trasero, verás a tu peque perfectamente y sabrás si va dormido o no.
    • Cerraduras de seguridad para niños: como en el caso de los enchufes, cuando los bebés empiezan a gatear, su afán por explorar todos los rincones de la casa, les lleva muchas veces a abrir cajones o armarios y a coger cosas peligrosas para ellos (tijeras, productos de limpieza, etc). Si no quieres sustos, no te quedará otra que colocar cerraduras de seguridad para niños en esos lugares “prohibidos”. 
    • Luz nocturna: el miedo a la oscuridad es muy habitual en los niños y afecta a su sueño. Un piloto o una luz quitamiedos tranquilizará a tu peque por las noches sin alterar su producción de melatonina para conciliar el sueño.
    • Protector de esquinas: los hay muy simples y transparentes, pero, si prefieres un toque divertido, puedes optar por protectores de esquinas con formas de animales. No solo evitarán que tu hijo/a se dañe seriamente si se golpea contra la esquina de un mueble o estante bajo, sino que vendrán bien para proteger a toda la familia de esos dichosos “picos” que se clavan donde más duele.

    ¿Cómo te has quedado después de leer esta lista de cosas necesarias para un recién nacido? 😅

    Como ya hemos comentado al principio, es solo una sugerencia y puede que tú, particularmente, no necesites algunas de estas cosas o, al contrario, tengas que añadir alguna más.

    Por último, y para tu tranquilidad , ten en cuenta que no todo lo vas a usar desde el principio, así que puedes ir distribuyendo el gasto a lo largo del tiempo.

  • Perros y recién nacidos: ¿pueden estar juntos?

    Perros y recién nacidos: ¿pueden estar juntos?

    Tu bebé ha nacido o está a punto de nacer, pero no sabes cómo va reaccionar tu perro cuando entre en casa el nuevo miembro de la familia . ¿Se llevan bien perros y recién nacidos?

    Es una cuestión que se plantean muchos padres cuando aún no han pasado por la experiencia de convivir con su perro y su bebé en la misma casa. “¿Se pondrá celoso cuando vea llegar al peque?” “¿Hay riesgo de que le haga daño por muy buen perro que sea?”. 

    ¡Tranquilidad! Si lees este artículo, verás que bebés y perros pueden llevarse estupendamente.

    Qué tal se llevan bebés y perros

    Para comenzar, recordemos que, en general, a los bebés les viene muy bien interactuar con animales, especialmente con los perros

    El contacto de un bebé con un perro mediante juegos, caricias, etc -siempre bajo la supervisión un adulto-, le beneficia tanto en el conocimiento de su propio cuerpo como en su desarrollo emocional y cognitivo. 

    Precauciones con perros y recién nacidos

    Por otro lado, ten en cuenta que un perro es un animal inteligente e intuitivo. Normalmente, ve a la familia como su manada y su instinto protector hace que tiendan a cuidar de los más pequeños, ya que los perciben como los miembros más frágiles del grupo.

    De hecho, si sueles usar Instagram, habrás visto un montón de vídeos entrañables donde algún perro se muestra en actitud cariñosa con un bebé, tirando de una manta para taparlo o velando su sueño mientras el peque duerme. 😍

    Cómo preparar a tu perro para la llegada del nuevo bebé

    Lo aconsejable para que tu perro tome con naturalidad la llegada de tu bebé es ir preparando el terreno un tiempo antes de la fecha del parto.

    ¿Qué puedes hacer? 

    Empieza por el lugar en el que va dormir tu peque. Si va a ser en su propia habitación, puedes ir dejando en ella los juguetes del perro o algún premio, a fin de que él los busque ahí y se familiarice con ese lugar. De esta forma, cuando el bebé ya esté en la habitación, el perro entrará en ella en estado de calma y no con el nerviosismo que les provoca cualquier novedad.

    De igual manera, es buena idea que tu perro vaya reconociendo las cosas del futuro de bebé. Así que puedes probar a sacarlo a pasear junto al carrito vacío, dejar que se acerque a su cuna o que olisquee su ropita.

    Y, por supuesto, antes de que el bebé entre en casa, asegúrate de que el perro está al día de todas sus vacunas y perfectamente desparasitado.

    Precauciones que hay que tomar cuando conviven perros y recién nacidos

    Encuentro entre perros y recién nacidos

     

    Aunque, como hemos comentado al principio, bebés y perros suelen interactuar en armonía y se llevan muy bien, debes tomar ciertas precauciones durante su convivencia: 

    • Cuida la higiene del perro. Cepíllalo todos los días, báñalo cada mes y límpiale las patas cuando venga de la calle.
    • Programa el momento en que tu bebé y el perro se van a ver por primera vez como una presentación oficial.
    • Observa la actitud del perro los primeros días y vigila también que tu recién nacido no tenga ninguna reacción alérgica.
    • Integra al perro en las rutinas del cuidado del bebé, hablándole y dejándole que esté cerca para que no se sienta excluido de la familia.
    • Supervisa los momentos en que el perro y el bebé estén juntos, sobre todo cuando este ya tenga edad de gatear y de tener gestos con la mascota que le podrían molestar, como tirarle de las orejas o del rabo.
    • No riñas al perro delante de tu bebé, ya que el animal podría asociar el castigo a la presencia del/la peque y esto le provocaría rechazo.
    • Si tu perro estaba acostumbrado a dormir en tu habitación contigo y quieres hacer colecho con tu bebé, no eches al perro del cuarto. Puedes colocar la cuna con el colchón del bebé en un lado de tu cama, y el perro al otro lado, idealmente usando una cama elevada para perros que permita el colecho.

    Cuna colecho de mascotas para integrar perros y recién nacidos

    En definitiva, perros y recién nacidos pueden tener una buena relación y convivir pacíficamente desde el principio, siempre y cuando el animal sienta que sigue siendo uno más de la familia y tengamos cuidado tanto con su higiene como con su forma de interactuar con el bebé.

  • Qué es el reflujo en bebés y cómo aliviarlo

    Qué es el reflujo en bebés y cómo aliviarlo

    La regurgitación o el reflujo en los bebés es algo de lo más normal, sobre todo, de los 0 a los 6 meses de edad.

    De hecho, casi la mitad de los bebés regurgita de una a tres veces al día. Cuando esto ocurre, el lactante devuelve espontáneamente la leche que acaba de tomar, poniendo perdido aquello que tenga por delante (en muchas ocasiones, su mami o su papi).

    El problema es si este episodio se repite más veces de lo normal a lo largo del día o cuando el bebé sigue regurgitando más allá de los 12 ó 14 meses de edad. Entonces, podríamos estar hablando de la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico o ERGE.

    Pero veamos exactamente qué es el reflujo en bebés, qué lo provoca y cómo se puede aliviar.

    En qué consiste el reflujo en los bebés

    A diferencia de los adultos,  el reflujo gastroesofágico en los bebés es generalmente un fenómeno fisiológico.

    Al no estar  totalmente desarrollado el músculo de su esfínter esofágico inferior, esa especie de anillo que une el esófago y el estómago, no llega a cerrar lo suficiente cuando el bebé traga y la comida pasa hacia abajo, de forma que, a veces, ese contenido vuelve hacia atrás y regresa de nuevo a la boca.

    Reflujo gastroesofágico en bebés

    Diferencia entre reflujo y vómito

    Después de explicar qué es el reflujo en los bebés, hay que aclarar que no es lo mismo reflujo que vómito, aunque el desenlace sea muy similar: la expulsión de la comida por la boca.

    La principal diferencia entre el reflujo y el vómito es que, así como con el reflujo, el bebé no tiene arcadas previas y, como mucho, arquea la espalda por sentirse un poco molesto, el vómito sí va acompañado de dolor, sudoración, palidez y mala cara. Esto se debe a que lo que se está produciendo al vomitar es una contracción fuerte de las paredes del estómago para intentar expulsar el contenido de su interior, porque le está haciendo daño, por ejemplo, a causa de una alergia alimentaria.

    Además, el reflujo ácido no siempre provoca el arrojo de una gran cantidad de leche. A veces, los bebés con reflujo prácticamente no expulsan nada.

    ¿Hasta qué edad suelen tener reflujo los bebés?

    Como hemos comentado en la introducción, hasta los 12 meses aproximadamente, el reflujo en los bebés se considera algo normal.

    A medida que el bebé va creciendo y se completa el desarrollo del esfínter esofágico inferior, el reflujo tiende a desaparecer y es raro que se produzcan nuevos episodios una vez cumplido el año y, menos aún, pasados los dos años.

    Muchas veces, la situación ya empieza a mejorar hacia los 6 meses de edad, cuando empieza a introducirse la alimentación complementaria en la dieta del bebé y este pasa más tiempo en posición vertical.

    Si tu bebé sigue regurgitando con más de un año o lo hace muchas veces al día, tendrías que consultarlo con el médico, porque podría tratarse de ERGE (Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico).

    Afortunadamente, esta enfermedad tiene una baja incidencia entre los niños y solo la padece en torno a un 2% de la población pediátrica.

    Síntomas que indican que tu bebé puede padecer ERGE

    Un bebé con Enfermedad de Reflujo Gastroesofágico (ERGE), además de regurgitar, puede presentar uno o varios de los siguientes síntomas:

    • Se muestra muy irritable y llora más de lo habitual.
    • Vomita bastante cantidad de leche y con mucha fuerza (vómito en proyectil).
    • Pierde peso o este aumenta menos de lo que debería ser a su edad.
    • Le cuesta tragar.
    • Respira con dificultad.
    • El vómito y/o las heces contienen sangre.
    • El pañal permanece seco durante 3 horas o más.

    Ojo, porque presentar estos síntomas no significa necesariamente tener ERGE. Hay afecciones distintas a esta enfermedad que pueden causar síntomas muy parecidos.

    Por tanto, tendrá que ser el médico el que examine al bebé y, después de una serie de pruebas, determine el diagnóstico definitivo.

    Es muy probable que el pediatra sugiera algunos cambios en la alimentación para comprobar que no se trata de una alergia alimentaria.

    Cómo se puede aliviar el reflujo en los bebés

    Si el reflujo de tu bebé es fisiológico y no se debe a algo más grave, puedes seguir algunas pautas para aliviarlo:

    • Evita alimentarle en exceso. Es mejor que le des cantidades pequeñas de comida con mayor frecuencia a que espacies más las tomas, pero dándole mayor cantidad cada vez.
    • Haz que tu bebé eructe con frecuencia, tanto durante la comida como después de comer, para impedir que los gases se acumulen en su estómago.
    • Después de cada comida, intenta mantener a tu bebé erguido, al menos, durante 30 minutos.
    • Usa una cuña anti-reflujo cuando acuestes a tu bebé. Le ayudará a tener una posición semierguida y, por tanto, a que el alimento que ha ingerido no vuelva al esófago.

    cuña anti-reflujo para evitar el reflujo en bebés

    • Evita que juegue o esté muy activo justo después de comer. Tampoco lo pongas en una mecedora hasta que no pase un buen rato.

    Ahora que ya conoces bien qué es el reflujo en bebés, aparte de seguir los consejos que te hemos dado, quizás sería recomendable que te hicieras con una buena colección de baberos. 😄

  • Terrores nocturnos en los niños: un miedo que se olvida al despertar

    Terrores nocturnos en los niños: un miedo que se olvida al despertar

    Gritar, llorar sin control, respirar de forma agitada, sudar o patear son algunos de los síntomas de los terrores nocturnos, que suelen afectar a niños a partir de los 2 años, aunque también se han dado casos en bebés de tan solo 18 meses.

    En principio, es algo normal y no debes alarmarte si tu peque sufre estos episodios de terror mientras duerme, pero has de saber cómo actuar en caso de que le ocurra para no empeorar la situación.

    Qué son los terrores nocturnos

    Los terrores nocturnos, al igual que las pesadillas y el sonambulismo,  son un tipo de “parasomnia”, es decir, un trastorno de la conducta durante el sueño que no produce una interrupción importante del mismo.

    Los niños y los bebés que sufren terrores nocturnos experimentan episodios de pánico durante la fase No-REM del sueño, la cual coincide con la etapa de adormecimiento – transición del estado de vigilia al sueño- y suele darse en el primer tercio de la noche.

    Normalmente, los episodios de terrores nocturnos en niños y bebés son breves y duran unos 10 minutos, pero hay veces que se alargan un poco más. 

    Cómo diferenciar los terrores nocturnos de las pesadillas

    Aunque, como hemos dicho, los terrores y las pesadillas pertenecen al grupo de las llamadas “parasomnias”, hay diferencias entre una y otra:

    • Mientras que los terrores nocturnos suelen producirse en la primera parte de la noche (fase No-REM, las pesadillas son malos sueños que se generan en la segunda parte, coincidiendo con la fase REM.
    • Un niño o un bebé que tiene pesadillas puede moverse y emitir algún sonido. Pero en un episodio de terrores nocturnos, el miedo se manifiesta de una forma más expresiva, con movimientos bruscos, patadas, gritos, respiración agitada y sudores. El niño puede incluso llegar a levantarse de la cuna o cama.
    • Durante una pesadilla, los niños pueden despertarse fácilmente. En cambio, es muy difícil despertar a un niño con terrores nocturnos, aunque nos parezca que está despierto por tener los ojos muy abiertos y la mirada fija.
    • Cuando el niño que ha tenido un episodio de terrores nocturnos se despierta, no recuerda nada de lo ocurrido. Sin embargo, las pesadillas pueden recordarse y dejar una mala sensación en el cuerpo tras despertar.

    ¿Hay factores pueden provocar los terrores nocturnos en los niños?

    Los terrores nocturnos infantiles se asocian principalmente con la falta de sueño, pero lo cierto es que no hay una única causa que provoque este tipo de trastorno en los niños.

    No obstante, aparte de los malos hábitos del sueño, los expertos apuntan a otros factores que influyen como detonante de los terrores nocturnos y que pueden darte una pista si tu peque los está padeciendo:

    • El propio proceso madurativo del cerebro de los niños, lo que origina “reajustes” nocturnos. En este sentido, es interesante conocer bien el sueño del bebé y sus diferentes etapas para estar preparados.
    • Tener fiebre.
    • Estar pasando por una etapa de estrés.
    • El cansancio extremo.
    • Malas experiencias recientes, como haber visto algo violento en la tele o haber presenciado una bronca fuerte entre sus padres.
    • Los viajes o cualquier cambio de horario que influya en sus hábitos de sueño.
    • Afecciones no diagnosticadas que interfieran en el sueño, como las apneas, el síndrome de las piernas inquietas.

    Cómo actuar si tu peque tiene terrores nocturnos

    Terrores nocturnos en los niños

    Generalmente, los padres que presencian por primera vez un episodio de terrores nocturnos en su hijo o hija, se asustan bastante, ya que, como más de uno comenta, “parece una auténtica posesión”. No es raro, pues, llevarse alguna patada o manotazo si se acercan mucho.

    Ante tal escena de gritos, llantos y movimientos bruscos, el primer impulso de muchos padres es despertar al niño inmediatamente. Sin embargo, según los expertos, esto es un error, primero, porque el niño está profundamente dormido – aunque tenga los ojos abiertos- y no va a reaccionar a ningún estímulo externo; y, segundo, porque, si llega a despertarse, va a estar mucho más agitado y le va a costar dormirse de nuevo.

    Por tanto, aunque suene descabellado, la recomendación de los pediatras ante un episodio de terrores nocturnos, es quedarse cerca del niño observándolo y procurando que no se haga daño con nada de lo que tenga alrededor. Una vez se le haya pasado, acomódale en su cuna o camita, dale un besito de buenas noches y vuelve a la cama.

    En este sentido, te puede venir muy bien practicar colecho durante los primeros años, ya que, por un lado, dormir junto a tu bebé te permitirá atenderle inmediatamente si padece terrores nocturnos o pesadillas, y, por otro, está demostrado que los bebés que duermen junto a los padres desarrollan un mayor grado de autoconfianza y seguridad en sí mismos. Este beneficio emocional favorecerá la transición de la cuna a la cama cuando llegue el momento.

    Otra cuestión es que tu peque sufra terrores nocturnos con mucha frecuencia o que los episodios sean especialmente violentos, en cuyo caso debes consultarlo con su pediatra.

    En definitiva, lo más habitual es que los terrores nocturnos en los niños se limiten a episodios breves que desaparecerán con el tiempo y con la ayuda de nuestros cuidados y de nuestro amor. 😊

  • Fiebre en el bebé: cuándo preocuparte y cómo actuar

    Fiebre en el bebé: cuándo preocuparte y cómo actuar

    Un momento muy temido por la mayoría de los padres primerizos es cuando a su bebé le sube la fiebre. Enseguida empiezan a pensar en problemas de salud y se echan a temblar.

    Pero lo cierto es que la fiebre en un bebé es algo esperable y muy común, ya que su organismo no ha regulado completamente el desarrollo de la temperatura y, por tanto, es fácil que esta suba ante cualquier estímulo.

    Esto no quiere decir que no tengas que estar alerta si tu bebé presenta fiebre alta durante un tiempo prolongado o se acompaña de otros síntomas.

    ¿Cuándo un bebé tiene fiebre?

    Aunque la temperatura corporal varía según la persona y el momento del día – por la mañana es más baja que por la tarde y la noche-, se considera que hay fiebre cuando se pasa de los 38º en la zona rectal y de los 37.5º en la zona axilar.

    Cómo tomar la temperatura a los niños correctamente

    La recomendación de los pediatras para tomar la temperatura a los bebés lactantes con precisión es usar un termómetro digital e introducírselo suavemente por el recto tan solo medio centímetro. Cuando el termómetro pite, hay que comprobar si marca más de 38º.

    En el caso de niños más mayores, puedes ponerle el termómetro digital en la axila o en la boca (debajo de la lengua), y observar si la temperatura supera los 37.5º después del pitido.

    Tomar temperatura correctamente para ver fiebre en niños

    Además del termómetro digital, tienes la opción de recurrir a un termómetro de oído si tu bebé tiene más de tres meses. La sonda del termómetro se coloca en la abertura de la oreja hasta sellarla del todo, y luego se pulsa el botón de inicio. Si el lector digital muestra una temperatura por encima de los 37.5º, se considerará fiebre.

    Detectar la fiebre del bebé a simple vista

    Por otra parte, el avance de la tecnología nos ha aportado un sistema para detectar la fiebre del bebé a simple vista. 

    Es un sistema que incorporan los colchones sanitarios Therm de Babykeeper, cuyo tejido termoactivo cambia de color cuando el bebé tiene fiebre.

    Colchón Babykeeper para detectar fiebre en el bebé

    Realmente, es una forma muy visual de ponernos en alerta. Luego, es cuestión de tomarle al bebé la temperatura con el termómetro para comprobar cuántas décimas tiene exactamente.

    Causas de la fiebre en los niños

    Lo primero que hay que tener en cuenta es que la fiebre es un síntoma que nos indica que el cuerpo está combatiendo alguna infección.

    Los lactantes y los niños pequeños son más vulnerables a las infecciones, puesto que su sistema inmunitario no está totalmente desarrollado.

    Las infecciones más comunes que pueden causar fiebre en los bebés son las siguientes:

    • Infecciones respiratorias por resfriado o gripe.
    • Gastroenteritis. 
    • Ciertas infecciones bacterianas, sobre todo la otitis, las infecciones que afectan a los senos paranasales, la neumonía y las infecciones de las vías urinarias.
    • Enfermedades víricas con manifestación cutánea (granitos o manchas) , como la “fiebre de los tres días”, el sarampión, la varicela, la “quinta enfermedad” o la escarlatina.

    Por otro lado, debemos desechar la creencia de que una fiebre más alta equivale a una infección o una enfermedad más grave. Hay enfermedades leves que causan fiebre alta y viceversa.

    Realmente, la gravedad de una enfermedad en los niños nos la indican mejor otros síntomas diferentes a la fiebre, como la pérdida del apetito, el rechazo de los líquidos o la dificultad para respirar.

    Aparte de las infecciones, una causa de la fiebre en los bebés es la inflamación de las encías por el crecimiento de los dientes, aunque no sucede en todos los casos ni la fiebre que provoca es elevada.

    Cómo actuar si el bebé tiene fiebre

    Termómetro digital para medir la fiebre en el bebé

    Ya hemos comentado antes que la fiebre es una forma que tiene el cuerpo humano de contraatacar a ciertos patógenos.

    Por tanto, si ves que tu bebé tiene fiebre pero está tranquilo, no debes tratar de bajarle la temperatura inmediatamente. Deja que sus defensas actúen contra las bacterias y los virus con la mejor arma para hacerlo, que es justamente la temperatura alta.

    Otra cosa es que tu bebé se muestre nervioso, llorón o, incluso, que vomite. En ese caso, sí tendrías que tomar estas medidas recomendadas por los pediatras para bajarle la fiebre a los niños:

    • Desabrigarlo y dejarlo ligero de ropa.
    • Darle agua frecuentemente para que se mantenga hidratado.
    • Ponerle paños frescos y húmedos en la frente, las muñecas y las pantorrillas.
    • Quedarte cerca para que note tu amor y tu protección.
    • Asegurarte de que la temperatura ambiente no excede de los 24º, poniendo el aire acondicionado si es necesario.
    • Si ves que su temperatura es superior a los 39º, consulta a tu pediatra. Puede que te recomiende darle algún antitérmico

    Cuándo llevar a urgencias a un niño con fiebre

    Según el Decálogo de la Fiebre de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPAP), siempre requiere consulta urgente la fiebre en un/a niño/a menor de 3 meses.

    En el resto de casos, aconsejan vigilar la fiebre del/la pequeño/a y acudir al centro médico si empeora o presenta alguno de estos síntomas:

    • Manchitas en la piel, de color rojo oscuro o morado, que no desaparecen al estirar la piel de alrededor.  
    • Decaimiento, irritabilidad o llanto excesivo y difícil de calmar.  
    • Rigidez de cuello o dificultad para flexionarlo.  
    • Convulsión o pérdida de conocimiento.  
    • Dificultad para respirar: marca las costillas y hunde el esternón, se oyen como silbidos cuando respira, respiración muy rápida, agitada, etc.  
    • Vómitos y/o diarrea persistentes o muy abundantes que causen deshidratación: lengua seca, ausencia de saliva, ojos hundidos, etc.  
    • No orina o la orina es escasa.

    Al final, todos estos detalles sobre la fiebre del bebé se van aprendiendo con la experiencia y, aunque es inevitable asustarte las primeras veces, acabas distinguiendo cuándo hay un motivo de preocupación y cuándo se trata de algo menor que puedes solucionar en casa.

    En cualquier caso, la información previa nunca viene mal. 😉

  • La habitación del bebé: 8 cosas prácticas que no deben faltar

    La habitación del bebé: 8 cosas prácticas que no deben faltar

    Prácticamente, desde el momento en que sabes que estás esperando un bebé, empiezas a pensar en ese espacio de la casa que va a estar reservado para él.

    Incluso aunque vayas a practicar colecho, sabes que lo ideal es disponer de una habitación para el bebé- a ser posible luminosa y bien ventilada-, donde guardar sus cositas (ropita, juguetes, accesorios…) y llevar a cabo parte de sus cuidados, hasta el día en que ese bebé sea un/a niño/a más autónomo/a.

    ¿Qué cosas no deberían faltar en la habitación del bebé?

    Moisés o minicuna

    Durante su etapa de recién nacido, el bebé necesita un lugar recogido para dormir, ya que ha estado nueve meses resguardado en el útero materno y, por tanto, va a seguir buscando esa “protección”.

    Si has decidido no practicar colecho, hay dos opciones óptimas para esos primeros meses de transición tras el parto:

    Moisés:

    Es el capazo de toda la vida, donde no solo puede dormir el bebé si lo colocas sobre un soporte adecuado, sino que te viene bien para viajar y para tenerlo cerca mientras haces otras cosas, ya que es fácil de transportar gracias a sus asas. Podrás usarlo hasta los cuatro meses aproximadamente.

    Moisés para habitación bebé

    Minicuna:

    a diferencia del moisés, su forma es más parecida a la de una cuna pero con un tamaño adaptado al recién nacido. Su vida útil – alrededor de 6 meses– es algo mayor que la del moisés y, si eliges un modelo de minicuna tijeras con ruedas, podrás desplazarla cómodamente por la casa y plegarla cuando tengas que guardarla.

    minicuna tijeras dosel habitacion bebe CoolDreams

    En caso de que prefieras que el bebé duerma junto a ti, también existen minicunas colecho diseñadas para un colecho seguro.

    Cuna 

    Así como el moisés y la minicuna son opciones que puedes decidir si comprar o no para tu bebé recién nacido, la cuna la vas a necesitar sí o sí hasta que el bebé tenga unos dos años.

    ¿Quiere decir esto que un bebé recién nacido también puede dormir en una cuna normal? 

    Sí, aunque mejor usando un reductor de cuna, por aquello que hemos comentado de que el bebé se sienta más recogido y seguro.

    Dicho esto, puedes escoger entre dos alternativas de cuna:


    Cuna convencional:

    Es la cuna tradicional, que solo puede usarse como cuna, aunque los modelos actuales suelen disponer de varias alturas regulables para ir cambiándolas a medida que el bebé crece y va poniéndose de pie.

    Cuna convertible:

    Tiene la ventaja de que la puedes convertir en cama cuando tu hijo/a empieza necesitar una, tan solo quitando uno de los laterales y poniendo una pieza especial a modo de barandilla. 

    Por tanto, es un mueble que el/la peque podrá usar desde los 0 a los 4 años.

    barrandillas blancas con bebé

    Ya sea una cuna convencional o una convertible, lo que sí es aconsejable es que el colchón de la cuna sea cómodo y transpirable.

    Cambiador de bebés

    Con un poco de maña y una toalla mullida, un bebé se puede cambiar en muchos sitios (una cama, el sofá…). Pero si tienes la posibilidad, pon un mueble alto en la habitación del bebé y coloca un cambiador de bebés, porque, entre otras cosas, te evitará dolores de espalda.

    Si no, una alternativa práctica son los cambiadores de bebé de madera, que se pueden acoplar fácilmente a la cuna y colocar encima un cambiador acolchado.

    Cambiador bebés para habitación bebé Cool Dreams

    Cómoda infantil

    En medio del ajetreo que conlleva criar a un bebé, se agradece mucho tener sus cosas ordenadas y clasificadas para localizarlas con rapidez.

    Habitación bebé: cómoda

    Una cómoda en la habitación del bebé viene genial para ordenar su ropita, sus baberos y las sabanitas de la cuna, entre otras cosas.

    Elementos de almacenaje rápido 

    Siguiendo con el tema del orden y de encontrar rápidamente lo que necesitas, no pueden faltar las cestitas, las cajitas o las bolsas de tela para colocar y tener a mano los utensilios del día a día en el cuidado del bebé, como las cremas, la colonia, los chupetes, los pañales o el cepillo del pelo.

    Cestita almacenaje para habitación bebé

    Eso sí, conviene que pongas estos elementos de almacenaje en un sitio visible de la habitación, por ejemplo, encima de la cómoda o en una estantería.

    Butaca o silloncito confortable 

    Silloncito para habitacion bebé

    Sobre todo, durante la lactancia, son muchas las horas que vas a pasar con tu bebé en brazos. Así que no dudes en dedicar un espacio de la habitación del bebé para poner una butaca o un silloncito confortable, donde puedas sentarte a dar el pecho, sacarte leche con un extractor, mecer al bebé o calmarle cuando llora.

     Hay que cuidarse y procurar la mejor postura para no acabar fatal de la espalda. 🙏 

    Mosquitera para el verano

    Esto no se suele mencionar cuando se habla de la habitación del bebé, pero consideramos que es importante que lo tengas en cuenta, especialmente si vives en una zona de campo.

    Mosquitera para habitación bebé

    Da mucha tranquilidad poder tener la habitación bien ventilada sin peligro de que entres bichos y mosquitos que puedan poner en riesgo la salud de tu peque. La mejor solución para ello es instalar una mosquitera en la ventana.

    Cojín nido

    Cojín nido para habitación bebé Cool Dreams

    Hemos dejado este elemento para el final del artículo, por sus múltiples funciones.

    cojin nido convertible cooldreams

    Después de la cuna, el cojín nido es, probablemente, lo más práctico que puedes tener en la habitación del bebé. ¿Por qué?

    Solo has de fijarte en todos los usos que le puedes dar:

    • Reductor de cuna durante los primeros meses (si no dispones de una mini cuna).
    • Cojín protector: mientras tú descansas, tu bebé puede estar a tu lado en el sofá preservando su propio espacio y sin peligro de caerse.
    • Cojín de lactancia XXL: separando la base del borde, lo puedes usar para amamantar a tu hijo/a con mayor comodidad y ergonomía. Evitarás así que tus brazos y tu espalda se sobrecarguen.
    • Moisés portátil: al ser tan ligero, puedes transportar fácilmente el cojín nido allá donde te muevas para tener a tu bebé cerca, tanto dentro como fuera de casa.
    • Cunita de viaje alternativa (durante las primeras semanas desde el nacimiento del bebé).

    Estas ocho cosas prácticas en la habitación del bebé te harán más fácil la crianza. Y si tienen un bonito diseño, pues mejor que mejor. 😍 

    Otro tema son los elementos puramente decorativos, pero eso ya depende de tus gustos.

    Nuestro consejo, en este sentido, es que seas minimalista, ya que mientras más recargada esté la habitación del bebé, más ácaros se acumularán y más tiempo deberás dedicarle a la limpieza.

  • Canciones para tu bebé: ¿cuáles elegir según el momento?

    Canciones para tu bebé: ¿cuáles elegir según el momento?

    Los beneficios de las canciones en los niños están más que demostrados.

    La música produce cambios fisiológicos positivos en su cuerpo, estimula su inteligencia emocional y su memoria, potencia su sensibilidad, despierta su creatividad y favorece su desarrollo afectivo, cognitivo, sensorial, motor y social.

    Por tanto, es muy recomendable que le pongas música a tu bebé incluso antes de nacer, ya que, desde el quinto mes de embarazo, el bebé puede escuchar tanto la voz de la madre como la de aquellos que la rodean, además de los sonidos que haya en el ambiente.

    Y aún mejor será si le cantas tú las canciones, porque tu voz favorecerá la relación afectiva con tu peque, reforzará el vínculo entre ambos y le hará sentirse más seguro/a.

    ¿Qué canciones puedes cantarle o ponerle a tu bebé?

    No tienen por qué ser canciones infantiles, pero, en general, se recomiendan canciones de corta duración, con letras sencillas, referencias a cosas básicas y melodías pegadizas.

    Puedes escoger un tipo de canción diferente dependiendo del efecto que quieras conseguir: relajarle, despertarle, incitarle al juego… 

    A continuación, te damos algunas ideas de canciones para tu bebé.

    Canciones para relajar a tu bebé

    Estos temas son, en general, unos clásicos que reconocerás enseguida. Ayudan a los bebés a relajarse para dormir en su colchón o a calmarse si lloran.

     

    No obstante, el primero es una versión distinta a la más conocida y que preferimos, porque sustituye la frase amenazante “que viene el Coco y te comerá”, por otra mucho más positiva.

    Duérmete niño

    Estrellita ¿dónde estás?

     

     

    Canciones para que tu peque tenga un feliz despertar

    Hay niños que tienen mejor despertar que otros, pero siempre agradecen que les canten para saludar el nuevo día.

     

    Buenos días

     

    Es hora de despertar

     

    Canciones para los ratos de juego

    Las canciones para jugar con nuestros pequeños funcionan mejor si se acompañan las letras con gestos, siguiendo lo que dice la letra.

    El juego de las flores

    El patio de mi casa

    Juan pequeño baila

     

    Soy una taza

     

     

    Canciones para favorecer el aprendizaje

    Hemos elegido tres canciones para que tu peque empiece a aprender ciertos conceptos básicos, como los animales más comunes, las vocales y los números.

    En la granja de mi tío

    Ronda de las vocales

     

     

     

    ¿Te han gustado estas canciones para tu bebé? Si tienes alguna sugerencia, puedes dejárnosla en un comentario y así iremos ampliando el repertorio. 😉 

  • Mesa de luz para niños: un juguete muy útil en la educación de tus hijos

    Mesa de luz para niños: un juguete muy útil en la educación de tus hijos

    Si hay algo que preocupa actualmente a bastantes padres y educadores es la dificultad que están teniendo muchos niños para concentrarse, lo cual supone un obstáculo importante a la hora de aprender incluso las cosas más básicas, como leer o escribir.

    En este contexto, la mesa de luz para niños se ha convertido en un recurso educativo y lúdico muy demandado, por su capacidad de  captar la atención de los pequeños y despertar su curiosidad e imaginación

    De hecho, aunque la mesa de luz es un juguete apto para cualquier niño/a, hay expertos que lo están recomendando especialmente para los niños diagnosticados con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), los cuales representan más de un 10% de la población infantil (casi el doble que hace 20 años).

    Qué es la mesa de luz para niños

    La mesa de luz está formada por una superficie luminosa de tamaño variable (según el modelo), que no solo atrae la atención de los niños en un espacio de juego y aprendizaje, sino que también les incita a experimentar y favorece su capacidad de concentración.

    A través de diversos materiales indicados para la mesa de luz, los niños experimentan con los colores y las formas, desarrollan el juego libre y dan rienda suelta a su imaginación y creatividad.

    Además, existen toda una serie de actividades con la mesa de luz que los niños pueden hacer para ir descubriendo el mundo de las letras y de los números de forma lúdica.

    La mesa de luz y el enfoque Reggio Emilia

    La mesa de luz para niños como recurso educativo responde al enfoque Reggio Emilia, una pedagogía innovadora creada en Italia por el maestro Loris Malaguzzi después de la II Guerra Mundial.

    Loris Malaguzzi, enfoque Reggio Emilia
    Loris Malaguzzi, creador de la pedagogía Reggio Emilia

    La pedagogía Reggio Emilia, de gran reconocimiento internacional, ve al niño como protagonista y primer maestro, al atribuirle la capacidad de crear su propio aprendizaje desde la curiosidad, la motivación y la imaginación.

    “Los niños tienen 100 maneras de expresarse, pero les robamos 99” 

    Loris Malaguzzi

    ¿Qué papel desempeñaría entonces el adulto en la pedagogía Reggio Emilia? Sería un segundo maestro o, mejor aún,  un co-aprendiz, que acompaña, guía y descubre conceptos con el niño. Además, según Loris Malaguzzi, los adultos han de brindar a los niños un entorno apropiado para que desarrollen todas sus potencialidades.

    Así pues, el espacio y el ambiente actuarían como un “tercer maestro”, que invita a crear y a descubrir a través de “provocaciones”. En este sentido, la mesa de luz, colocada dentro de una habitación o en un cuarto de juegos, sería una de esas provocaciones, gracias a su luminosidad. La luz atrae de forma natural a los niños y transforma los materiales que se posan sobre ella, por lo que la atención se mantiene durante más tiempo.

    ¿Hay alguna diferencia entre “mesa de luz” y “mesa de luz Montessori?

    Realmente no. Por las similitudes existentes entre el enfoque Reggio Emilia y la pedagogía Montessori, a la mesa de luz para niños también se le suele llamar “mesa de luz Montessori”. Así que puede que en algunos sitios la veas con ese nombre, aunque se trate del mismo dispositivo.

    Cuáles son los beneficios de la mesa de luz para los niños

    Diversos estudios sobre la mesa de luz como recurso pedagógico atribuyen a este juguete importantes beneficios. Estos son los más destacados:

    • Estimula la atención: la superficie luminosa de la mesa focaliza la atención de los niños, los cuales sienten una atracción natural por la luz. Gracias a esto, los pequeños pueden mantener durante más tiempo la concentración en estímulos que se van sucediendo en la mesa a través de los juegos y actividades didácticas con diferentes materiales. Este es un aspecto especialmente beneficioso para los niños con problemas de déficit de atención o hiperactividad, ya que pueden adquirir habilidades que les ayuden a desenvolverse mejor en el día a día.
    • Favorece la integración de los estímulos sensoriales: observando e interactuando con los materiales sobre la mesa de luz, los niños experimentan con varios sentidos, debido a que manipulan objetos con diversas formas, colores y texturas (acetatos con marco de madera o metal, blandiblú, piezas de construcción translúcidas, etc). Estas características de los objetos quedan exaltadas con el brillo de la luz.
    • Relaja: el tipo de luz que proyecta la mesa genera una atmósfera agradable, que llama la atención, pero que también consigue un efecto relajante en los niños. Este efecto se acentúa cuando ellos se sumergen en la experimentación y en el juego, que les hace disfrutar y fluir.
    • Mejora la concentración: una vez  que los niños empiezan a experimentar y a manipular lo que tienen encima de la mesa, el efecto focalizador de la luz y la exaltación de los detalles que esta provoca sobre los materiales translúcidos, logran mejorar considerablemente la concentración de los pequeños. De nuevo, se trata de un beneficio particularmente interesante para casos de TDAH.
    • Aumenta la curiosidad: los niños encuentran ante sí todo un mundo de formas, colores, texturas y brillos, que pueden ir cambiando y generando diferentes efectos. Esto despierta enormemente su curiosidad.
    • Fomenta la imaginación y la creatividad: a través de la exploración de la luz y de la manipulación de los objetos, los niños van descubriendo conceptos y creando nuevas ideas; se hacen preguntas y buscan las respuestas.
    • Refuerza el aprendizaje: la mesa de luz ofrece múltiples posibilidades para desarrollar actividades manipulativas de lectoescritura, matemáticas, ciencias o artes plásticas. El enfoque lúdico, enriquecido por el juego visual y cromático que genera la luz, refuerza el aprendizaje de todas las materias. En este sentido, es un recurso educativo potente para niños que tienen problemas de comprensión o retraso en el lenguaje.
    • Ayuda a la motricidad: al manipular constantemente los materiales, los pequeños desarrollan tanto las habilidades con las manos como la coordinación viso manual.

    Materiales para la mesa de luz: elige los adecuados

    Como ya habrás deducido de todo lo que hemos explicado en los enunciados anteriores, los materiales para la mesa de luz infantil han de reunir una serie de requisitos para ser utilizados como recurso lúdico-educativo:

    • Variedad de formas
    • Variedad cromática
    • Diversidad de texturas 
    • Translúcidos (total o parcialmente)

    A partir de estas características, existe toda una gama de materiales para las mesas de luz, que permiten generar juegos y actividades dirigidas a la creación artística, la lectura, la escritura, las matemáticas o las ciencias.

    Aunque algunos de estos materiales los puedes hacer en casa, en el mercado los encontrarás ya diseñados por expertos y fabricados con todas las garantías de durabilidad y seguridad.

    No obstante, con el fin de facilitarte la tarea de elegir los materiales más adecuados para tu hijo/a según su edad, hemos hecho la siguiente selección:

    Materiales para niños de +1 año

    Ollas sensoriales mesa luz para niños

    Ollas sensoriales translúcidas: tienen 6 colores diferentes, llevan tapa y son apilables. Manipulándolas y combinándolas, tus hijos aprenden a emparejar y mezclar colores, además de desarrollar la lógica y la coordinación.

    Bloques construcción mesa luz para niños

    Bloques de construcción de silicona: se pueden encajar para crear construcciones o incluso para trabajar algunos ejercicios matemáticos.

    Semiesferas mesa luz para niños

    Semiesferas: el efecto de la luz sobre ellas llama mucho la atención e invita a reflexionar. Se pueden usar individualmente o combinadas para formar esferas enteras y con distintos colores.

    Materiales para niños de +18 meses

    Jarras translúcidas mesa luz para niños

    Jarras de colores translúcidas: es un material que ofrece a los niños mucho juego para experimentar con elementos de distintas texturas (agua, arena, etc). Mientras las rellenan, van observando el volumen desde fuera, junto con el efecto cromático de las propias jarras y el brillo que proyecta sobre ellas la mesa de luz. Abarcan así diversas áreas de aprendizaje, como los colores, las mediciones, matemáticas o la comprensión del mundo.

    Bloques sensoriales madera mesa luz para niños

     Bloques sensoriales de madera: tienen distintas formas y una ventanita interior con diferentes tipos de relleno: arena, perlas de colores, líquido o una capa sólida de color. Además de hacer construcciones, los niños reciben estímulos sensoriales al agitar los bloques y observar la reacción de cada tipo de relleno.

    Materiales para niños de +3 años

    Losetas translúcidas mesa luz para niños

    Losetas translúcidas: como la mayoría de los materiales para la mesa de luz infantil, las losetas translúcidas son de diferentes colores, para conseguir esa integración sensorial que hemos explicado al hablar de los beneficios de la mesa de luz. En este caso, las losetas vienen en botes de 2 tamaños y 6 colores. Se pueden utilizar para componer distintas formas con ellos o también como marcadores (por ejemplo, de un número o de una letra), así como para actividades de contar, clasificar y reconocer colores.

    Letras translúcidas mesa luz para niños

    Letras y números translúcidos: son un magnífico recurso para que los niños empiecen a familiarizarse con las letras y los números, además de iniciarse en la lectoescritura y las matemáticas adaptadas a su edad (por ejemplo, contar de 0 a 10). Con las letras, pueden jugar a ordenarlas formando el abecedario o palabras sencillas. Al ser de diferentes colores, también practican la asociación cromática, con el estímulo añadido que esto supone.

    Letras silicona trazo mesa luz para niños

    Letras y números de silicona para trazar: ofrecen una experiencia más táctil, ya que disponen de un trazo en relieve que los pequeños pueden ir siguiendo con el dedo desde el principio hasta el final de la forma. Como en el caso anterior, es un buen recurso para empezar a explorar la lectura, la escritura y, si se trata de números, también las primeras cuentas.

    Números silicona puntos mesa luz para niños

    Números de silicona con puntos: cada número contiene la cantidad de puntos correspondientes a su valor (por ejemplo, el cuatro, lleva cuatro puntos). Así, los niños cuentan de manera sensorial y van identificando la cantidad de puntos con la forma del número.

    Figuras geométricas translúcidas mesa luz para niños

    Figuras geométricas translúcidas: son piezas grandes en 2D, hechas en acrílico y de diferentes colores y formas. Aparte de crear mezclas cromáticas superponiendo las figuras, los niños se acercan a los principios de la geometría impulsados por su propia curiosidad.

    Geos colores translúcidos mesa luz para niños

    Geos de colores translúcidos: este material añade la percepción del 3D a las formas geométricas. Son los propios niños los que pueden montar cada figura de 3D a partir de una plantilla, lo cual les sirve para comparar capacidades.

    Bloques construcción translúcidos mesa luz para niños

    Bloques translúcidos para construir: los juegos de construcción son de los que más fomentan la creatividad en los niños. Pero, además, la diversidad cromática y el brillo que aportan los bloques translúcidos para las mesas de luz, son estímulos añadidos a la imaginación de los pequeños.

    Tubos sensoriales mesa luz para niños

    Tubos sensoriales: contienen dentro líquidos de distinta densidad. Al darse la vuelta, generan formas, movimientos y transiciones, que despiertan la curiosidad de los niños, los cuales reaccionarán con una observación atenta y una interpretación personal de lo que están viendo. Hay muchas variantes de tubos sensoriales, en los que varían los efectos, como los tubos sensoriales con brillo o los tubos sensoriales con espirales. Todos ellos constituyen un buen material para que tus hijos se introduzcan en la comprensión de los principios científicos, además de fomentar el lenguaje descriptivo.

    Materiales para niños de +5 años

    Continentes translúcidos mesa luz para niños

    Continentes del mundo translúcidos: son piezas desmontables de plástico translúcido con la forma de los continentes del mundo. Con este material, tus hijos comenzarán a introducirse de forma entretenida en la geografía mundial, no solo identificando cada continente y colocándolo donde corresponde, sino escribiendo los nombres encima con un rotulador de borrado en seco.

    Materiales para niños de +6 años

    Tablero 100 translúcido mesa luz para niños

    Tablero del 100 translúcido: es una lámina translúcida dividida en 100 cuadrados, cada uno de los cuales contiene una cifra del 1 al 100, en orden ascendente. Combina muy bien con los discos translúcidos, que pueden servir para enmarcar cifras concretas. Son muchas las posibilidades de este material para jugar con conceptos matemáticos: desde contar del 1 al 100 o contar de dos en dos a distinguir entre pares e impares, etc.

    Después de todo lo que te hemos explicado sobre la mesa de luz para niños, ¿no crees que es un buen recurso de juego y aprendizaje al que tus hijos le van a sacar mucho partido? No olvidemos que los niños pueden usar la mesa de luz desde los 12 meses hasta los 11 años de edad.

    Por no hablar de lo que este juguete les ayuda a desarrollar aptitudes personales muy valiosas, que quizás empiezan a escasear hoy en día, como la curiosidad o la paciencia. ?

     

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